El FS Móstoles consigue proclamarse campeón de liga del grupo IV de 2ªB, en la primera ocasión que ha tenido, tras ganar su vigésimo quinto partido de liga, consiguiendo el pleno de las mismas, ante un Dehesa Villalba que le puso las cosas muy difíciles en el feudo de Villafontana.

Fecha y jornada marcada por la afición local, que ha esperado dos semanas de parón liguero para poder cantar el tan ansiado alirón y celebrar un nuevo titulo liguero, que llego incluso antes de que el partido hubiera concluido, al conocerse la derrota del segundo clasificado el Cobisa en su encuentro y no ser para nada trascendente el resultado del partido que se disputaba en Villafontana.

Aún así la grada quería celebrar el titulo con otra victoria y se la prometían felices cuando con dos zarpazos Palomares ponía un 2-0 en el marcador. Fue el momento en que reacciono un buen Dehesa Villalba, equipo joven y atrevido que no tuvo miedo al líder y que consiguió darle la vuelta al marcador con tantos de Tote, David y Miguel Alonso para llegar al descanso con 2-3 en el luminoso, haciendo evidente que no venían a ser un mero espectador y que supieron aprovechar la mala primera parte de los hombres de Tino de la Cruz.

Sabía el Dehesa Villalba, que el fondo físico iba a ser determinante y supo su entrenador Antonio Crespo, dosificar mucho a su plantilla, con rotaciones cortas y entrega de sus pupilos en los minutos en pista. Supieron aumentar la ventaja al 2-4 en los primeros segundos de la reanudación y desde ese momento centrarse en su trabajo defensivo y aprovechar los errores del rival.

Pero el 2-4 fue una herida que dolió al líder, que, en vez de lamentarse, se enrabieto buscando la portería rival, acelerando su ritmo de trabajo y fraguando una gran segunda parte con un parcial de 6-0 para darle la vuelta al marcador, con tantos de Carlitos, Guille que conseguía el empate. Fue Aarón quien ponía por delante los suyos nada mas conseguir el empate y la goleada la cerraba Velasco, Palomares (que alcanza los 43 tantos en liga) y cerraba la cuenta un soberbio Rafa Luque, que además de “goleador” supo mantener a su equipo en la pista en los momentos más difíciles con afortunadas intervenciones bajo palos.

Ahora el FS Móstoles ya tiene dos de los objetivos de la temporada en su haber, en el horizonte están los complicados y difíciles play-off. En la competición liguera, queda el objetivo tal vez de conseguir el pleno de victorias, como ansia toda la afición, aunque seguramente el cuerpo técnico y los jugadores, piensan mas en llegar a los ansiados play-off con la mejor preparación posible. Ha llegado el mes de abril, que junto a mayo y junio deciden el éxito, la gloria e incluso el fracaso de toda una temporada.